Donde haya olas me encontraréis.
En ese momento del día cuando la luz es tibia y las fachadas del pueblo brillan. En ese instante en que los mástiles del puerto se mecen despacio y tintinean rítmicos los cables. Ahí me encontraréis. Cubierto de salitre, revuelto el cabello y la mirada, dura la barba y oscurecida la piel. Vuelta la vista al viento, las manos hundidas en la arena y la sonrisa persiguiendo velas blancas rumbo Sur. El corazón acompasado a la rompiente, enamorado, expuesto y feliz. Ebrio de verano y de aventura. Apaciguada mi tormenta por una risueña plenitud. Así me encontraréis. Sereno e invencible. En un lugar que no lo es. Que existe y desaparece.
En ese momento del día cuando la luz es tibia y las fachadas del pueblo brillan. En ese instante en que los mástiles del puerto se mecen despacio y tintinean rítmicos los cables. Ahí me encontraréis. Cubierto de salitre, revuelto el cabello y la mirada, dura la barba y oscurecida la piel. Vuelta la vista al viento, las manos hundidas en la arena y la sonrisa persiguiendo velas blancas rumbo Sur. El corazón acompasado a la rompiente, enamorado, expuesto y feliz. Ebrio de verano y de aventura. Apaciguada mi tormenta por una risueña plenitud. Así me encontraréis. Sereno e invencible. En un lugar que no lo es. Que existe y desaparece.
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4 Comentarios
Preciosos texto.
ResponderEliminar¡Qué disfrutes!
Muchas gracias Colo. ¡Viniendo de ti es un gran cumplido!
ResponderEliminarPrecioso!!!
ResponderEliminarMuchas gracias! :*
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