Así es. Un día fuimos jóvenes. No es que ahora seamos viejos en el sentido estricto, pero ya dejamos atrás esa época en que el mundo se presentaba ante nosotros construido sólo a base de promesas y todo estaba por hacer.
Hace 12 años, en octubre de 1998, vivía entregado a esa época. Tenía 24 años y después de acabar la carrera y tomarme unos meses sabáticos dedicados al windsurf, la playa invernal y la vida contemplativa, llegó la oportunidad de participar en el I Contest Balear de Windsurf Freestyle, una disciplina que en aquel momento era emergente y bastante desconocida. Se trataba de competir en mangas de dos y hacer todas las maniobras posibles, cuánto más complicadas, radicales y estéticas, mejor. No me lo pensé. Estaba lleno de fuerza y ganas de disfrutar del deporte y el mar.
Recuerdo que era un domingo y el viento estuvo flojo y racheado desde por la mañana. Hicimos la skipper's meeting en la playa del Sun Club, cerca del Port de Pollença, y Emilio de Bellini Funboats (la tienda local que organizó el campeonato) decidió trasladar el campo de regatas a Alcanada. Fue un acierto y pudimos completar el contest, aunque en condiciones límite. Qué difícil y agotador se hizo encadenar maniobras en cada manga, casi sin viento ni olas, con velones enorme de más de 6m2.
Hoy, echando un vistazo a viejas revistas de wind, he encontrado el número 148 de la revista Surf A Vela, de diciembre de 1998, donde aparece la crónica de aquel campeonato. Fue un gran día. Me divertí y me cansé a partes iguales y al final acabé tercero, que no está nada mal. ¡Qué tiempos!
Bonus track: una foto aún más antigua, the wonder years, con el pelo largo, 22 años y nuestro Renault 5 mítico cargado de tablas:
Hace 12 años, en octubre de 1998, vivía entregado a esa época. Tenía 24 años y después de acabar la carrera y tomarme unos meses sabáticos dedicados al windsurf, la playa invernal y la vida contemplativa, llegó la oportunidad de participar en el I Contest Balear de Windsurf Freestyle, una disciplina que en aquel momento era emergente y bastante desconocida. Se trataba de competir en mangas de dos y hacer todas las maniobras posibles, cuánto más complicadas, radicales y estéticas, mejor. No me lo pensé. Estaba lleno de fuerza y ganas de disfrutar del deporte y el mar.
Recuerdo que era un domingo y el viento estuvo flojo y racheado desde por la mañana. Hicimos la skipper's meeting en la playa del Sun Club, cerca del Port de Pollença, y Emilio de Bellini Funboats (la tienda local que organizó el campeonato) decidió trasladar el campo de regatas a Alcanada. Fue un acierto y pudimos completar el contest, aunque en condiciones límite. Qué difícil y agotador se hizo encadenar maniobras en cada manga, casi sin viento ni olas, con velones enorme de más de 6m2.
Hoy, echando un vistazo a viejas revistas de wind, he encontrado el número 148 de la revista Surf A Vela, de diciembre de 1998, donde aparece la crónica de aquel campeonato. Fue un gran día. Me divertí y me cansé a partes iguales y al final acabé tercero, que no está nada mal. ¡Qué tiempos!
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| La crónica (yo aparezco en la tercera foto de la derecha) - Click para ampliar! |
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| La portada del número 148 |
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2 Comentarios
Aquest tipo ets tu? Hòstia nen. He quedat impressionat i no pel quart gol que acaba de ficar el teu Real Madrid.
ResponderEliminarSaps que els Beach Boys comencen gira ara? Collons, poden triar al Dúo Dimámico de teloners. Així gent jove com ells.
Doncs sí Xisco, sóc jo. Qui ens ha vist, eh? Però bé, cada època té les seves coses bones!
ResponderEliminarEls Beach Boys varen fer un sacrilegi que els hi va reportar molts calers: posar veu a la música surf que fins la seva arrbada era tan sols instrumental. Coses del màrketing.
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